Diablos Rojos de Juliaca entrenó en distintos horarios y canchas para estar preparados a cualquier condición climática que se presentara en el partido. Por eso, el equipo de César Espino practicó en canchas secas y también mojadas, ante la probabilidad que lloviera.
El público de Juliaca estaba tan molesta con el jugador Alexis Torres, por fallar un penal que exigían al comando técnico la sustitución del jugador.
Debido al reclamo impuesto por Unión Minas Orcopampa, el plantel de Union Alfonso Ugarte de Tacna entró en confusión a donde viajar, pues existió la posibilidad que el conjunto arequipeño sea el clasificado aunque eso no ocurrió.
El equipo de Diablos Rojos de Juliaca se vio obligado a utilizar chompas de color blanco para evitar confusiones con la casaquilla de Unión Alfonso Ugarte de Tacna que tiene los colores rojos y blancos.
Según se supo es tanta la rivalidad entre Juliaca y Puno que cuando los periodistas de Puno se trasladan hasta la ciudad de los vientos del partido, lo hacen con el temor de ser agredidos.
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